Suiza es la mayor refinería de oro
Suiza es sin duda uno de los top países en el mundo en lo que se refiere a estabilidad tanto social, como política y económica, pero sobre todo porque posee una larga tradición de ser capaces de proteger la propiedad privada, digamos que desde la 2da Guerra Mundial, suiza siempre ha desempeñado un papel importante en todo lo que se refiere al negocio del oro.
¿Por qué Suiza?
Algunas de las razones por la que esto es así son: Se ha convertido en un centro de alta importancia de transacciones de lingotes, esto en parte gracias a la gran cantidad de refinerías de oro que existen, también esto se debe a las inversiones importantes que se efectúan tanto para particulares como para empresas, además debido a su historia, Suiza es sin duda uno de los principales productores de oro en todo el mundo.
Hoy por hoy, Suiza es sin duda el lugar en la tierra más relevante para los metales preciosos físicos ya que además cuenta con la ventaja de estar en el mero centro de Europa.
El oro, antes de ser almacenado en bancos o empresas de almacenamiento especiales, para por un proceso intenso de refinamiento que logra que se transforme en oro puro y la permite adquirir su forma en lingotes. Las refinerías de oro son las responsables de la purificación de dicho oro, desde el famoso “Doré” que es el producto que sale de las minas y contiene casi todo el % de oro puro hasta los cospeles o lingotes.
Las refinerías suizas son responsables de la producción de alrededor del 70% de los lingotes de oro que existen, lo que explica en gran medida por que Suiza sigue siendo la mayor refinería de oro en todo el mundo.
La industria del refinado de oro en Suiza
Se sabe que el refinado del oro es una industria que requiere de precisión, que no permite márgenes de error y cuyo resultado da la producción de lingotes que por lo general contienen un 99.99% de oro puro y que debe de poseer un peso exacto por lo tanto, una vez que el oro ha sido refinado, se ha fabricado y grabado los lingotes, uno por uno se van pesando de forma individual y luego son pulidos para eliminar cualquier exceso hasta que alcance su peso que debe de ser ligeramente mayor al que está establecido.
Ese sobre peso del que hablamos es algo muy particular de la industria en Suiza que trabaja en el refinado del oro, pues logra que no se venda jamás un lingote que posea menor peso que el peso con que se declaró.
Si algún lingote es detectado con estas características, por más que la cantidad sea insignificante, es devuelto a fundición, es por esta razón que el oro de suiza es considerado como el oro con más pureza en todo el mundo.
Es por todas estas razones que Suiza se encuentra a la vanguardia de la refinería de oro, pues vale la pena pagar los dos dólares que se pagan por encima del “papel oro” si obtenemos un refinado y fundido de oro de calidad únicos.
